El humo de los incendios de Canadá cubre el noreste de Estados Unidos y genera alerta sanitaria
El noreste de Estados Unidos se ha visto afectado por una densa nube de humo procedente de los incendios forestales que arrasan el sur de Canadá desde hace semanas. El humo ha oscurecido el cielo de ciudades como Nueva York, Washington y Filadelfia, reduciendo la visibilidad y tiñendo el horizonte de un tono anaranjado.
El humo ha llegado a Estados Unidos impulsado por los vientos del norte y ha provocado una caída de la calidad del aire en la región. Según la plataforma Fire Air Now, el índice de calidad del aire (AQI) en Nueva York llegó a 484 el martes por la noche, lo que corresponde a un nivel “peligroso”. El miércoles por la mañana, Nueva York tuvo la peor calidad de aire del mundo, superando a ciudades como Nueva Delhi o Lahore, según los datos de IQAir.
Las autoridades sanitarias han emitido avisos por mala calidad del aire y han recomendado a la población limitar las actividades al aire libre, especialmente a las personas más vulnerables como los ancianos, los niños y los enfermos de corazón o pulmón. El humo contiene partículas contaminantes que pueden causar irritación en los ojos, la nariz y la garganta, así como problemas respiratorios y cardiovasculares.
Los incendios forestales en Canadá se deben a las condiciones de sequía y calor extremo que se han registrado en el país en las últimas semanas. Según el Centro Interinstitucional Canadiense de Incendios Forestales, hay más de 400 incendios activos en el país, de los cuales más de 200 están fuera de control. Los incendios han consumido miles de hectáreas de bosque y han obligado a evacuar a miles de personas.